Sublime
Sublime a todo aquello que es visto como eminente, que alcanza un nivel elevado en la escala de valores morales, intelectuales o estéticos.
El término "sublime" tiene raíces en la palabra "sublimar", que en el ámbito de la física se refiere al cambio directo de un estado sólido a un estado gaseoso sin pasar por el estado líquido. Sin embargo, en el contexto filosófico y estético, el concepto de lo sublime toma una dimensión mucho más profunda y abstracta.
Históricamente, "sublime" describe aquello que se destaca por su excelencia, belleza o perfección, algo que eleva el espíritu y sobrepasa lo ordinario. Obras que poseen una grandeza extraordinaria, como una "poesía sublime" o un "arte sublime".
No obstante, desde la filosofía, lo sublime va más allá de lo meramente bello, implicando una experiencia que desafía las capacidades humanas de comprensión y percepción.
El término sublime se atribuye al profesor y escritor griego Longino, quien lo usó en su obra Sobre lo Sublime, donde explora el poder del lenguaje para elevar el alma humana. Fue redescubierta en el Renacimiento. Esta obra gozó de gran popularidad durante el Barroco y el Romanticismo, período en que el término sublime ganó particular importancia.
Ver también Romanticismo.
Sublime en filosofía
En filosofía, lo sublime se entiende como una experiencia que va más allá de lo bello o agradable. Es un estado en el que el individuo se enfrenta a algo inmenso o aterrador, que excede su capacidad de comprensión.
Este encuentro con lo sublime produce una mezcla de admiración y angustia, un deleite que al mismo tiempo es inquietante. Lo sublime no es simplemente algo grandioso o majestuoso; es aquello que desafía las estructuras racionales y nos confronta con lo inabarcable.
Lo sublime es capaz dedañar o destruir al observador, a quien le es imposible asimilar una belleza extrema, que vas más allá de su racionalidad.
Immanuel Kant y lo sublime
Immanuel Kant diferencia entre lo bello y lo sublime en su obra Crítica del juicio (1790).
Para Kant, lo bello es algo que se puede contemplar con placer, que armoniza con nuestras facultades sensoriales y racionales. Lo sublime nos sobrepasa, causando incluso incomodidad o una sensación de pequeñez ante la inmensidad de lo que se percibe.
Kant divide lo sublime en dos tipos: lo sublime matemático y lo sublime dinámico.
- Sublime matemático se refiere a aquello que es tan vasto que no puede ser comprendido en su totalidad, como el espacio infinito o la inmensidad del universo.
- Sublime dinámico está relacionado con la naturaleza y su poder destructivo, como una tormenta violenta o una montaña imponente.
En ambos casos, el espectador siente una mezcla de terror y admiración, pues la experiencia de lo sublime trasciende las facultades racionales.
La estética, como rama de la filosofía que estudia la belleza, también aborda el concepto de lo sublime como una experiencia que va más allá de la belleza convencional. Mientras que lo bello se relaciona con el equilibrio, la armonía y la proporción, lo sublime es algo que trasciende lo humano, algo admirable, pero que también puede resultar aterrador o abrumador.
Ver también Estética.
Cómo citar: Significados, Equipo (10/10/2024). "Sublime". En: Significados.com. Disponible en: https://www.significados.com/sublime/ Consultado:
