Cultura Tolteca

Frank Arellano
Frank Arellano
Profesor de Historia y Maestro en Lingüística

La cultura tolteca se desarrolló en los valles centrales de México entre los siglos IX y XII, teniendo su centro político en la ciudad de Tula, en el actual Estado de Hidalgo. Los toltecas eran un pueblo de lengua nahua, que llegó al altiplano mexicano migrando desde zonas áridas del norte del continente americano.

Una vez asentados en la región central de México, los toltecas asimilaron costumbres de pueblos sedentarios y luego edificaron su gran centro urbano: Tollan Xicotitlan (actual Tula). De ahí procede su nombre, ya que en el idioma náuhatl toltecatl significa "habitante de Tollan".

No obstante, la palabra tolteca iba más allá de denotar un gentilicio. Se usaba como equivalente de "civilizado". Pues en su capital se construyeron centros ceremoniales, se conocían técnicas agrícolas, y se estudiaba astronomía. Ya en la época del imperio mexica, se llamaba 'tolteca' a los maestros artesanos.

A la cultura tolteca se le considera el puente que enlaza las tradiciones de Teotihuacán con las de la civilización azteca-mexica. Tan importante era el prestigio tolteca en el periodo posclásico mesoamericano que los mexicas vinculaban su linaje y antepasados con el de los gobernantes de la realeza de Tula.

Tula tolteca
Pirámides de la antigua Tollan-Xicocotitlan (Tula), el centro de poder tolteca. (CC BY-SA 3.0) Cortesía: Susana Torres Sánchez.

Tula vivió su momento de esplendor hacia el año 1050 d.C., cuando se calcula que llegó a albergar a más de 50.000 moradores. El centro de la ciudad estaba reservado para las élites de sacerdotes y guerreros, mientras los campesinos y artesanos habitaban en las afueras.

Registros arqueológicos informan que en la ciudad convivía gente de diversos orígenes étnicos, haciendo que allí se fusionaran algunas costumbres chichimecas y toltecas. Hacia el siglo XII, Tula fue quemada en varias ocasiones, lo que llevó a su decadencia. Sin embargo, el legado cultural tolteca ya se había extendido ampliamente en la región mesoamericana.

Ver también Cultura Mexica y Cultura Olmeca

Ubicación geográfica tolteca

Los toltecas se establecieron en los valles del norte del altiplano central mexicano, específicamente en el lugar que hoy ocupa el estado de Hidalgo. El sitio arqueológico de su ciudad principal, Tula, se halla a unos 80 kilómetros al norte de Ciudad de México.

Aunque los toltecas no llegaron a fundar un gran imperio que se extendiese a otros territorios, su poderío militar, su control de rutas comerciales y su influencia cultural, los convirtieron en el pueblo más notable del periodo posclásico temprano (950 d.C.-1200).

Grupos toltecas migraron hacia la península de Yucatán en el siglo X. Tal migración llevó influencias toltecas a la ciudad maya de Chichén Itzá. Esto se observa en el arte y arquitectura. La pirámide de Kukulcán, por ejemplo, está dedicada a la serpiente emplumada, llamada Quetzalcóatl por los toltecas.

Asimismo, existen numerosas similitudes entre el "Templo de los Guerreros" de Chichén Itzá y el "templo de Tlahuizcalpantecuhtli" de Tollan-Xicocotitlan. Todo lo cual da muestras del mestizaje tolteca con otros pueblos mesoamericanos.

tula tolteca
Localización de Tula y el área tolteca en el norte del altiplano central de México.

Ver también Cultura maya

Características de la cultura tolteca

Pueblo guerrero y militarizado. Los toltecas hicieron uso de la fuerza para dominar a otras tribus y controlar rutas comerciales. En los muros de sus templos se aprecian imágenes de batallas y del sacrificio de los derrotados.

Civilización influyente y expansionista. La guerra, el comercio y la migración hacia diversas regiones convirtieron a los toltecas en diseminadores de las tradiciones mesoamericanas del periodo clásico al posclásico. Esto tuvo un significado relevante en la formación de la civilización azteca-mexica.

Grandes adoradores de Quetzalcóatl. Entre los distintos dioses venerados se destaca Quetzalcóatl, la serpiente emplumada. Tal culto lo tomaron de las tradiciones teotihuacanas y luego lo difundieron en otras regiones. La imagen de este dios asociado a la regeneración de la vida y a la sabiduría está presente en monumentos y esculturas.

Mitos trascendentales. El líder Ce Ácatl Topiltzin Quetzalcóatl (c. 895-947) relacionó su dinastía al dios Quetzalcóatl. Pero este gobernante fue forzado a abandonar Tula por seguidores de Tezcatlipoca. Se fugó yendo hacia el este y prometiendo volver algún día. Esta fue la leyenda malinterpretada por los mexicas cuando los españoles llegaron a México y los confundieron con mensajeros del dios serpiente.

Centro político religioso en Tula. La ciudad capital tolteca alcanzó unos 16 Km2 de superficie. Tenía un templo ceremonial en su centro y una plaza pública. Alrededor se encontraba la pirámide B, sobre la que están erigidos los "atlantes", o guerreros de piedra y el tzompantli (la hilera de cráneos).

Atlantes tollan
Los atlantes de Tula en la parte alta del templo de Tlahuizcalpantecuhtli "el señor de la estrella del amanecer". Foto: Steve Cadman (CC BY-SA 2.0)

Economía de la cultura tolteca

Como otros pueblos mesoamericanos precedentes, los toltecas basaron su economía en la agricultura y el comercio, a lo que se sumó la recolección de tributos de pueblos que subyugaban mediante ataques y combates.

Las técnicas agrarias toltecas eran sofisticadas. Practicaban el cultivo mediante sistemas de riego, trazando canales para que el agua de los ríos irrigase sus campos. El cultivo más importante, sin duda, era el maíz. También sembraban frijoles, ajíes, amaranto, y consumían aguacate, que tal vez obtenían mediante intercambios.

Evidencias arqueológicas sugieren que en Tula se importaba cacao desde las selvas centroamericanas, y que exportaba obsidiana, obtenida de minas en la Sierra de las Navajas, cercana a la ciudad de Pachuca. Los artesanos toltecas trabajaban este material, así como la turquesa.

Con todo ello se observa que Tula era un importante puesto comercial. Junto a esto, su importancia militar y política la hacía un centro de recaudación de tributos.

Religión de los toltecas

Los toltecas eran politeístas, esto es, que adoraban a varios dioses. Un elemento clave surgido con el encumbramiento de la cultura tolteca es que los rituales religiosos pasaron a estar cada vez más ligados a las guerras.

La migración de pueblos provenientes del norte pudo acrecentar la competencia por los recursos disponibles hacia el siglo X, lo que explica la justificación de la toma de prisioneros y los ritos de sangre vinculados a la fertilidad de la tierra.

Los dioses toltecas estaban asociados a la naturaleza. Entre estos, estaban los dioses tomados de la tradición teotiuhacana, como Quetzalcóatl y Tláloc. Estos dioses luego formarían parte del panteón de la civilización azteca-méxica, y también fueron vinculados a la mentalidad militarista y al sistema de gobierno teocrático y guerrero.

Dioses toltecas más importantes

Quetzalcóatl

Es la serpiente emplumada que da vida a los seres humanos y les permite renacer en esta era. Las representaciones de Quetzalcóatl ya se hallaban en pueblos mesoamericanos desde el periodo preclásico, pero se puede considerar a los toltecas como los grandes difusores de su culto.
Tláloc Es el dios de la lluvia y quien permite que las cosechas puedan ser abundantes. Es otro de los dioses encontrados en las representaciones de la ciudad de Tollan (Tula).
Tezcatlipoca Dios de la oscuridad y "espejo humeante". Es visto como el contrario de Quetzalcóatl. Sus seguidores hicieron una revuelta en Tula para exigir más sacrificios humanos y desterrar al rey Ce Ácatl Topiltzin, quien no creía necesario derramar tanta sangre.
Itzlacoliuhqui Dios de la obsidiana y de los cuchillos hechos con este material. Se asociaba al frío y a las heladas del amanecer.
Tlahuizcalpantecuhtli Representa a la estrella de la mañana y la aurora. Por tanto, es una personificación del planeta Venus. Este dios se considera una de las manifestaciones de energía de Quetzalcóatl.

Vea también:

Bibliografía

Davies, N. (1977). The Toltecs, Until the Fall of Tula. University of Oklahoma Press.

Navarrete, F. (2011) "Chichimecas y toltecas en el valle de México", en Estudios de Cultura Náhuatl. Vol. 42, páginas 19-50.

Evans, S. (2007) "Las raíces toltecas de la política azteca: los palacios", en Arqueología Mexicana. Vol. 15, núm. 85, páginas 55-57.

Cómo citar: Arellano, Frank (25/09/2023). "Cultura Tolteca". En: Significados.com. Disponible en: https://www.significados.com/cultura-tolteca/ Consultado:

Frank Arellano
Frank Arellano
Profesor de Historia y Ciencias Sociales durante más de 15 años. Licenciado en Historia (2010) y Magíster Scientiae en Lingüística (2015) por la Universidad de Los Andes en Mérida.
Otros contenidos que pueden ser de tu interés